Los puros de moxa son una de las partes más famosas en la técnica de la moxibustión. Las láminas de moxa se enrollan y comprimen dando lugar a los puros de moxa, facilitando al profesional focalizar el calor de la brasa sobre el área específica a tratar.
Las moxas pueden ser normales y también de un tipo preparado para no producir humo (una mezcla moxa y hierbas carbonizadas para que cuando se prendan no produzcan humo), las normales producen el agradable aroma de la madera quemada.